Dayne Sánchez Quevedo: Arte, innovación y emprendimiento. Edición Mujeres 2025.
- Revista Más Líderes
- 18 mar
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 25 mar
¿Bajo qué métricas puede atribuírsele a alguien la etiqueta de líder? ¿Qué tiene que hacer, decir, pensar o construir aquella persona para que nadie pueda decirle que no merece tal título?
Nuestra invitada especial en The Women Issue cuenta con una formación académica diversa: Dayne Sánchez Quevedo se ha preparado como chef empresarial y obtuvo una licenciatura en Derecho. Además, su compromiso es claro: no solo buscar el éxito personal, sino también el bienestar colectivo. Esta última característica es la más importante en la construcción de una figura de liderazgo.

Sánchez Quevedo es mujer, madre, esposa y empresaria; pero sobre todo, es humana. Actualmente, como abogada, está cursando una especialidad en justicia penal para adolescentes, una arista del quehacer jurídico que requiere una sensibilidad mayor debido a los temas que se abordan, a las características del grupo etario de población que son los jóvenes. ¿Cómo se transita de un modelo punitivista y carcelario, cuando hablamos de derecho penal, a uno de readaptación y con prioridad en la reinserción social?
Para Revista Más Líderes, Gloria Dayne cuenta que su padre también es abogado, uno con más de 30 años de experiencia en la abogacía: “No podría dejar de lado la maravillosa educación que recibí por parte de mis padres, que ha sido un pilar para mi formación como abogada y empresaria”.
También, Gloria Dayne es experta en fragancias; ella le atribuye un carácter científico y metodológico a un sector donde las esencias son parte de la identidad personal y del reflejo del interior de cada individuo, donde también se trata de proyectar el lado más sofisticado del mismo.
“En estos años, me di cuenta que el pueblo tabasqueño no contaba con una opción confiable y, sobre todo, accesible de perfumería; por lo que decidí emprender”.
El objetivo del negocio de Sánchez Quevedo es ofrecer perfumes y fragancias de diseñador, originales y de alta calidad, a precios accesibles; esto, igual, sin la necesidad de que los consumidores tengan que salir del estado o, incluso del país, para obtener estos productos. “Cuando se me presentó la oportunidad de incursionar en el maravilloso mundo de la perfumería, no lo pensé dos veces. Yo ya amaba el perfume, y no me fue difícil vender algo que me encanta”, expresa con entusiasmo.
A lo largo de su carrera, Dayne Sánchez Quevedo también ha enfrentado múltiples retos y complejidades que han puesto en duda su templanza: “La pandemia trajo consigo no solo una crisis económica, sino también desafíos sociales y de salud que impactaron directamente nuestra operación”, señala a Más Líderes. Pero Dayne Sánchez Quevedo también hace referencia a que no es sencillo consolidar una empresa sostenible; se necesita una planeación para el desarrollo de una marca y del ofrecimiento de un servicio novedoso.

Por otro lado, para Gloria Dayne la familia es una pieza necesaria tanto en su vida cotidiana como a nivel profesional y laboral: “Mi familia, especialmente mis hijos y esposo, han sido y siguen siendo una parte fundamental de mi camino como empresaria”, asevera. Para ella, ellos también significan apoyo emocional e inspiración constante; y, al final del día, Gloria percibe a sus hijos como la próxima generación, como los sucesores de un legado que seguirá yendo en ascenso; quienes llevarán su visión a niveles que, tal vez, ella jamás pensó, y todo con el mismo amor, integridad y pasión que la han caracterizado desde un principio: “Lo que me llena de orgullo es saber que mis hijos representan el futuro de nuestra empresa”.
Igualmente, Sánchez Quevedo se detiene un momento a agradecer por todo lo que ha logrado; a la vida, a Dios, al Creador.
“Cada fragancia que comercializo y cada decisión que tomo, es un reflejo de su gracia y bendición”, dice.
Ella es consciente de que su gratitud hacia esta presencia omnipresente de la cosmovisión cristiana no tiene fin: “Gracias, Señor, por ser la fuente de todo lo que tengo”.

A decir verdad, Dayne tuvo sus primeros acercamientos con la perfumería desde la infancia: “Debo confesar que como muchos empecé con los famosos perfumes... ya saben, de olores de fresa y chicle. Pero era tal mi amor por los aromas que, a escondidas, entraba al cuarto de mis papás a robar un poco de sus perfumes y así oler a ellos, a lo que usaban; sabía que si llevaba su olor ellos estaban conmigo”.
Entonces, con el tiempo Sánchez Quevedo comenzó a experimentar con las fragancias, conociendo cada uno de sus matices; así, una pasión infantil se convirtió en un exitoso proyecto.
Revista Más Líderes se complace de recontar la historia de Gloria Dayne, quien es sinónimo de un liderazgo disruptivo; porque, como marca, establecerse no es fácil. Y mantenerse, mucho menos; aunque Sánchez Quevedo ha logrado ambas cosas.
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